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Veröffentlicht am 07.06.2019
Llega el verano y con él las innumerables promesas de desconexión durante las vacaciones que, al final, muy pocos cumplen. Y es que, por mucho que intentemos desconectar la mayoría acaba llevándose sus smartphones a todas partes. De hecho, para muchos es casi imposible separarse de sus teléfonos ni siquiera cuando van a la playa, aún a riesgo de que sus terminales sufran las consecuencias de una exposición prolongada al sol, se llenen de arena o puedan caerse al agua.
Desde Certideal, plataforma dedicada a la venta de teléfonos reacondicionados y de segunda mano, señalan que “la necesidad que tenemos de estar conectados hace que no podamos despegarnos de nuestros teléfonos casi en ningún momento. Vamos con ellos al baño, nos acostamos con ellos, los utilizamos para hacer deporte…actividades que no sólo muestran el ‘enganche’ que tenemos sino que, también, nos obligan a ser conscientes de la necesidad de limpiar nuestros smartphones de manera habitual”.
Y es que, según la Universidad de Barcelona, la pantalla de nuestros teléfonos tienen 30 veces más bacterias que la tapa de un inodoro. No obstante, estas bacterias suelen ser las mismas que tenemos en nuestra cara por lo que no suponen, en principio, un riesgo. Aun así, no está de más mejorar en la higiene de nuestros terminales y, por ello, Certideal ha recogido algunas recomendaciones y trucos sobre cómo debemos limpiar nuestros smartphones:
Pantalla. Para limpiarla lo mejor es usar paños de microfibra o una gamuza similar a las que se utilizan para limpiar las gafas. Primero utiliza el paño para quitar el polvo y, a continuación, usa la gamuza. Ésta puedes remojarla con un poco de agua o con una solución que mezcle un 80% de agua y un 20% de alcohol. Bajo ningún concepto uses limpiacristales.
Bordes, botones y conectores. Para limpiar estas zonas lo mejor es usar un bastoncillo de algodón ligeramente húmedo. De esta manera puedes acceder mejor a las ranuras y limpiarlo completamente. Si no disponemos de un bastoncillo, podemos usar un mondadientes que hayamos desinfectado previamente.
Arena en la cámara. La arena puede rayar la cámara por lo que es importante que si llevamos nuestro smartphone a la playa, lo mantengamos lo más protegido posible. Aun así, si se nos ha llenado de arena lo primero que debemos hacer es limpiar con una brocha o un cepillo de dientes la arena del terminal y debemos evitar, a toda costa, soplar la arena ya que podemos incrustarla aún más. A continuación, procederemos a limpiar la cámara con un paño totalmente seco.
Agua y líquidos. Si nuestro teléfono se nos ha mojado de manera accidental debemos sacarlo lo más rápidamente posible del agua, no encenderlo y secarlo. Tras eliminar el agua salada podemos introducir el móvil en arroz, arena para gatos o avena. Este proceso tarda hasta dos días y no siempre ‘salva’ el teléfono ya que depende de cuánto se haya mojado. Eso sí, no olvides que cuando pongas en práctica este truco el móvil debe estar siempre apagado y sin la batería.
Rayones en la pantalla. La arena también puede rayar la pantalla de nuestros teléfonos. Si esto sucede podemos poner un poco de pasta de dientes en un paño húmedo y frotar sobre al arañazo. También podemos usar una mezcla de dos partes de talco con una de agua para crear una pasta que extenderemos de manera similar a la pasta de dientes. No obstante, desde Certideal avisan de que esto solo funciona si los rasguños son leves.
Por último, la compañía recomienda desinfectar una vez al mes nuestro teléfono “ya que, con el paso del tiempo, nuestros terminales acumulan mucha suciedad y pueden causarnos enfermedades o problemas en la piel”. Para ello, podemos limpiar nuestros smartphones con un paño suave humedecido con una mezcla de una parte de agua destilada con tres de alcohol isopropílico, y secarlo.
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